....
en islas inocentes
cantan bosques de aromas
se desgajan
bellotas de oro
caen
a ríos repujados
los niños de Sidón las escuchan
en la canción del marinero ebrio
pero los ciudadanos de Sidón
inventarían inventarios
los ciudadanos de Sidón estornudan
y deploran el olor de las especias
los ciudadanos
de Sidón
aguardan
el día de la fiesta
cuando tiñen el manto del pontífice
con la sangre de un párvulo
y así
los niños de Sidón
definitivamente
crecen
....
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